La semana comenzó con grandes expectativas para Adrien Fourmaux. Como el piloto recién contratado por Hyundai para 2025, él estaba ansioso por demostrar sus habilidades en el Monza Masters Show. Sin embargo, lo que sucedió durante la competencia fue un verdadero drama. Su coche se convirtió en el único que podía aprovechar la ayuda eléctrica del sistema híbrido, dándole una ventaja significativa sobre sus rivales. Esto desató una serie de debates y discusiones en el mundo del rally...
Como explicaba Dani Sordo: "Son unos caballos extra, que en este piso de asfalto se notan más aún". Y es que en Hyundai y Toyota, los pilotos prefirieron aprovechar los kilómetros del fin de semana en el "templo de la velocidad" para probar la configuración de la próxima temporada. En Ford, sin embargo, la decisión fue diferente, y eso dio la ventaja a Fourmaux. El francés se impuso en la final a Thierry Neuville, pero también cayó a Sebastien Ogier, Jari-Matti Latvala, Sami Pajari y Dani Sordo mismo (que llevaba a Marc Martí como copiloto) con total contundencia en el tramo trazado en la larga recta de Monza...
Una de las ausencias más destacadas fue la de Kalle Rovanpera. Aunque estaba en el cartel, no pudo asistir debido a una fiesta prenavideña en Finlandia. Sin embargo, el bicampeón, el jueves, probó el coche de Le Mans en el simulador de Colonia. Sordo, Latvala y Pajari fueron los primeros en rodar el viernes, con invitados como pasajeros, y el sábado llegaron Neuville, Ogier y Fourmaux. Todo esto se dio en la emotiva despedida de Pirelli tras cuatro años como suministrador de neumáticos del Mundial. Ogier, que ha sido muy crítico con los neumáticos italianos, no tuvo reparos en alabar su trabajo...
Mientras que Fourmaux estaba celebrando su victoria en el Monza Masters Show, en el Monza Rally Show, la prueba en la que ha triunfado siete veces Valentino Rossi, el triunfo fue para el italiano Andrea Crugnola. Crugnola se impuso por sólo 2,7 segundos sobre el ruso Nikolay Gryazin, mostrando su habilidad y determinación en la pista. Esto demuestra que en el mundo del rally, hay siempre competidores dispuestos a dar lo mejor de sí mismos...
Yamaha, en un principio, parecía ser el destino natural para él. Su relación con la marca era estrecha, y muchos esperaban que se uniera a la elite de la motocicleta en MotoGP. Sin embargo, las cosas no siempre salieron como se esperaban. El turco tuvo que enfrentarse a desafíos y torceduras, pero siempre mantuvo la esperanza de llegar a la cima.
El año 2021 fue un año crucial para él. Al ganar el título de la categoría de las motos de serie, demostró que tenía lo suficiente para competir en la máxima categoría. Pero el salto a MotoGP no era tan sencillo como se pensaba.
BMW lo recibió con los brazos abiertos, y juntos lograron ganar el título al primer intento. Esto mostró el enorme potencial de BMW en la Superbikes y también confirmó la confianza que el turco tenía en sí mismo.
En la Gala de la FIM, como bicampeón del Mundial de Superbike, Razgatlioglu recogió su medalla de oro. Esta medalla no solo era un logro personal para él, sino también un testimonio de su habilidad y determinación.
Durante la gala, preguntado por Jorge Viegas, presidente de la Federación Internacional de Motociclismo, volvió a reafirmar su deseo de formar parte de MotoGP. "¿Si me veréis en el Mundial? Eso espero. Espero cumplir el sueño de subir a MotoGP. Ya veremos en el futuro. Tengo un contrato de un año más con BMW, pero no sé si podremos ir al Mundial con la marca. Veremos. En 2026 estoy libre, ya veremos. Pero tengo un año más con BMW y me centro en la próxima temporada. Necesito conseguir otro título".
Este deseo se ve reflejado en cada movimiento que realiza. Siempre está buscando la oportunidad de subir a la máxima categoría y demostrar lo que puede hacer.