La duodécima edición de los Premios Feroz se desarrolló con un ambiente cargado de sentimientos y momentos memorables. El acto más emotivo de la noche fue el tributo rendido a la querida actriz Marisa Paredes, quien falleció recientemente. Pedro Almodóvar, director con el que trabajó en numerosas ocasiones, subió al escenario para ofrecer unas palabras llenas de cariño y respeto hacia su compañera. La audiencia respondió con una cálida ovación, demostrando así su admiración por la intérprete que dejó huella en el cine español.
El evento también estuvo marcado por el humor y las intervenciones inesperadas. El presentador del programa, Dani, mantuvo a la audiencia entretenida con sus ocurrencias, incluyendo comentarios sobre temas de actualidad como la separación de Leire Martínez de La Oreja de Van Gogh. Además, Bob Pop, narrador de la gala para La 2 de TVE, no dudó en hacer bromas relacionadas con premiados y situaciones contemporáneas, como cuando comentó sobre Shakira tras el reconocimiento a la serie Celeste. Sin embargo, uno de los momentos más hilarantes llegó con Yolanda Ramos, quien, junto a Daniel Guzmán, entregaba los premios al mejor guion y música original. Su intervención desenfadada, llena de sarcasmos y risas, capturó la atención de todos los presentes, recordándoles que incluso en los eventos más solemnes hay espacio para la espontaneidad y la diversión.
Los Premios Feroz 2025 celebraron no solo el talento y la creatividad en el mundo del cine y la televisión, sino también honraron la memoria de figuras icónicas como Marisa Paredes. Este tipo de homenajes nos recuerdan la importancia de valorar y recordar a aquellos que han contribuido significativamente a nuestras vidas a través de su arte. Asimismo, el humor y la espontaneidad presentes durante la ceremonia reflejan la capacidad del ser humano para encontrar alegría y conexión en momentos compartidos, reforzando la idea de que la cultura y el entretenimiento son esenciales para nuestra sociedad.
Fernando Díaz ha vuelto a los medios de comunicación para compartir su experiencia con una parálisis facial que le alejó de sus actividades profesionales. En enero de 2024, el comunicador experimentó síntomas alarmantes que lo llevaron a un extenso proceso de recuperación. A pesar de las dificultades, su determinación y amor propio fueron fundamentales para superar este desafío. Durante su reaparición en el programa Fiesta, reveló detalles sobre su enfermedad y cómo logró volver al trabajo.
La historia de Fernando comenzó durante las festividades navideñas, cuando se percató de anomalías en su rostro. Estos primeros signos se intensificaron rápidamente, llevándolo a un diagnóstico sorprendente. Las molestias y la imposibilidad de realizar tareas cotidianas marcaron el inicio de un camino difícil pero lleno de enseñanzas.
En plena celebración de Reyes, Fernando notó cambios preocupantes en su salud. Su hijo fue el primero en advertir algo inusual un día antes. Al despertar, se encontró con una cara caída y un dolor intenso en la nuca. Inicialmente, temía haber sufrido un ictus, pero los exámenes médicos revelaron que era una reactivación del virus de la varicela que afectaba su nervio facial. Esto le impedía comer sin ayuda y dormir cómodamente. Pasó días durmiendo en una silla debido a las intensas molestias. Sin embargo, frente a estas adversidades, Fernando nunca dejó de luchar y buscó la forma de superar cada obstáculo.
Tras el diagnóstico, Fernando inició un proceso de recuperación que requirió paciencia y fortaleza mental. Aunque enfrentó momentos difíciles, siempre mantuvo viva la esperanza y el amor propio como pilares fundamentales para su curación. Su regreso a la televisión es testimonio de su indomable espíritu.
A medida que avanzaba su recuperación, Fernando experimentó altibajos emocionales. Reconoce que en ocasiones sentía deseos de abandonar todo, pero sabía que no podía permitirse ese lujo. La importancia del autocuidado y el amor propio fueron claves para mantenerse fuerte. Durante su aparición en el programa, aseguró que ahora vive mejor y más consciente de su entorno. Este cambio positivo en su perspectiva de vida se refleja en su actitud y en cómo se presenta ante el público. Además, disfrutó de una emotiva reunión con Verónica Dulanto, su excompañera de Cuatro, recordando los buenos momentos compartidos y el apoyo mutuo durante su ausencia. Esta visita sirvió como un recordatorio de la importancia del compañerismo y la solidaridad en momentos difíciles.