La Laguna Tenerife consiguió una victoria ajustada y emocionante frente a Joventut, logrando un marcador final de 82-81. Este resultado iguala su número de victorias con el líder Real Madrid, colocándolos en la cima de la liga. El partido estuvo lleno de altibajos, con La Laguna remontando desde atrás para alcanzar el triunfo gracias a un triple decisivo de Abromaitis a pocos segundos del final.
El encuentro comenzó con La Laguna tomando ventaja inicialmente, pero Joventut respondió rápidamente para tomar el control durante gran parte del juego. A pesar de las dificultades, los locales mostraron una tenacidad admirable y lograron dar vuelta al marcador en los momentos cruciales. El base Marcelinho Huertas fue clave, liderando a su equipo con una destacada actuación.
El partido se tornó intenso en los últimos minutos, cuando La Laguna Tenerife, que había estado detrás durante buena parte del juego, comenzó a acortar distancias. Con un marcador cerrado y la tensión al máximo, cada jugada era vital. Huertas, junto con Costa y Sastre, fueron fundamentales en esta etapa final. La reacción de los isleños fue gradual, aprovechando mejor sus oportunidades en ataque y defendiendo eficazmente a Dotson, quien había sido el motor ofensivo del Joventut. Un triple de Abromaitis a menos de medio minuto del final selló el destino del partido, forzando a Joventut a fallar en sus últimas posesiones.
El primer tiempo fue testigo de un intercambio constante de canastas entre ambos equipos. Joventut logró capitalizar errores defensivos de La Laguna y tomó ventaja en el segundo cuarto. Sin embargo, los locales no se rindieron y continuaron luchando por recuperar la iniciativa. La segunda mitad del partido vio a Joventut ampliar su margen, pero La Laguna nunca perdió la esperanza.
A lo largo del partido, la balanza se inclinó varias veces hacia diferentes lados. En el primer periodo, La Laguna dominaba claramente, forzando al entrenador de Joventut a solicitar tiempo muerto. Sin embargo, la efectividad de Dotson y Robertson permitió a los visitantes recuperarse y tomar la delantera antes del descanso. En la reanudación, Joventut aumentó su ventaja hasta llegar a 11 puntos, pero La Laguna persistió, canalizando su juego hacia el interior y fortaleciendo su defensa. El tercer cuarto fue especialmente crítico, con Kraag manteniendo la distancia para los catalanes, mientras que Guerra y Scrubb intentaban acortarla. Finalmente, el último cuarto se convirtió en un duelo de titanes, donde cada punto fue disputado ferozmente hasta el último instante.
En un vibrante partido de baloncesto, UCAM Murcia logró imponerse a Covirán Granada con un marcador final de 88-82. El encuentro se desarrolló en el Palacio de los Deportes de Granada ante más de seis mil espectadores entusiastas. Ambos equipos ofrecieron un juego emocionante y repleto de alternativas, con destacadas actuaciones individuales que marcaron la diferencia. La victoria de UCAM Murcia se consolidó gracias a una estrategia efectiva y una mayor profundidad de banquillo.
El inicio del partido mostró un equilibrio notable entre ambos conjuntos. Los primeros minutos fueron testigos de un intercambio constante de canastas, donde ninguno de los equipos lograba establecer una ventaja significativa. La paridad se mantuvo durante los dos primeros cuartos, aunque UCAM Murcia comenzó a mostrar signos de superioridad hacia el final del segundo periodo. Las defensas estuvieron intensas, lo que generó varias faltas personales que influyeron en el desarrollo del juego.
Los primeros veinte minutos del encuentro dejaron ver un duelo táctico entre los entrenadores, quienes ajustaban constantemente sus estrategias en función del desempeño de sus jugadores. Covirán Granada contó con un sólido inicio impulsado por García y Noua, quienes lideraron las acciones ofensivas. Por su parte, UCAM Murcia encontró en Hakanson y Gates a sus principales referentes anotadores. A pesar de las exclusiones tempranas de algunos jugadores clave, ambos equipos lograron mantener un ritmo alto y emocionante hasta el descanso.
Tras el descanso, UCAM Murcia salió con una actitud más agresiva y logró tomar ventaja en el marcador. El equipo visitante aprovechó mejor las oportunidades de ataque y demostró mayor consistencia en los últimos minutos. La profundidad de su banquillo resultó crucial para mantener el nivel competitivo cuando algunos titulares sufrieron problemas de faltas. Este factor permitió a UCAM Murcia gestionar mejor los últimos instantes del partido.
En la segunda mitad, UCAM Murcia incrementó su intensidad defensiva, lo que dificultó las opciones de anotación para Covirán Granada. En particular, el tercer cuarto fue determinante, ya que el equipo murciano logró abrir una brecha importante que le permitió manejar el juego con mayor comodidad. Aunque Covirán intentó una reacción en el último periodo, no logró revertir la tendencia favorable a su rival. Las exclusiones de varios jugadores clave también tuvieron un impacto significativo en el desarrollo del encuentro, especialmente en el caso de Covirán Granada, cuyo juego se vio afectado por las ausencias.