Durante la película, un secreto retumba. Aunque la película esté firmada por Antón Álvarez, es claramente una película muy de Pucho. Y al final, se descubre ese secreto a través de una carta. Pero la película en sí es un viaje a lo más profundo de un ser humano. C. Tangana dijo que "no es una película de flamenco. Es una película de amor, de las cosas de la vida. Todos tenemos dolores y penas, y yo uso el flamenco para poder hablar de mi libro. Hice esta película para rascar donde dolía y para levantar ese polvo del que antes no se hablaba. Simplemente para querer sanar. Intentar entender algunas cosas del pasado."
La película no es fácil ni un musical, como se pensaba al principio. Fue un viaje a las tripas de un ser humano, y a veces, durante el rodaje, tuvieron que parar porque no podían emocionalmente con ello. Pero a pesar de todo, la película ha tenido un impacto en sus vidas. C. Tangana dijo que "empecé con esto porque me busco Yerai. Él me eligió antes de que yo estuviera preparado. Estamos ya en un proyecto de escritura y creo que lo próximo será una peli de ficción."
Cuando se le propuso tatuarse el logo en la cara, Clara Galle se mostró decidida. "En la cara igual no, pero en otra parte sí", afirmó, mostrando su determinación. Aunque el presentador, David Broncano, intentó disuadirla, ella estaba completamente convencida de que "lo único urgente es vivir" y que se debía hacer lo que quería.
Además, Clara Galle le animó a que el presentador eligiese el tatuaje. "Tú lo eliges y yo me tatúo", dijo, mostrando su confianza en él. Y así, finalmente se hizo el tatuaje en la muñeca derecha, un acto que marcaría un hito en su carrera.
Clara Galle aseguró que no había tenido tiempo de comprar un regalo especial para Broncano, pero le trajo varios souvenirs que había traído de su último viaje a Lisboa. Esto mostró su generosidad y su cercanía con el equipo de la serie.
Después de tatuarse, Clara Galle se mostró satisfecha. "Imagínate poder decir cuando tenga nietos ala abuela ese tatuaje donde te lo hiciste y yo… en La Revuelta… Imagínate", dijo, mostrando su alegría por el acto.
La Revuelta no es directo y se graba a primera hora de la tarde. Esto les permite cortar lo que no les gusta y añadir cositas que, aunque no deben hacer mucha gracia en el equipo de David Broncano, no tienen otra opción que lidiar con ellas. Y ese cambio en la emisión les llevó a tirar de humor para retener al público.
Jorge Ponce comenzó tirando de humor al anunciar un cambio en el programa para emitir el sorteo de la Bonoloto. Esto no era algo habitual, pero les dio la oportunidad de mostrar su creatividad y desafiar a la competencia. Y El Gran Wyoming no se quedó atrás. Anoche, arrancó El Intermedio dando la respuesta a David Broncano y sumándose a esta guerra de te.
Y siguió con sus chistes, cachondeándose de sí mismo y de la competencia. "Aquí encontrarán algo mucho más sorprendente, un señor de avanzada edad leyendo el teleprompter, mientras piensa qué poner en la quiniela del Espanyol- Osasuna del próximo fin de semana", dijo.
Además, respondió a Dani Mateo al decirle que "son insultos de la derecha, tú no los entiendes". Y con su famosa berrea de 20 minutos, demostró el poder de su experiencia y la capacidad de tirar de ironía.
Y aunque la guerra de las mofas siga, es evidente que ambos programas están dispuestos a luchar por el público. Cada uno está utilizando sus recursos para mostrar su superioridad y retar a la competencia.
En resumen, la guerra de las mofas entre La Revuelta y El Gran Wyoming es una dinámica interesante que está atracción la atención de los espectadores. Y solo veremos cómo se desarrolla en los próximos programas.