Diez días después del fatídico 29 de octubre, la cifra de víctimas de la DANA continúa creciendo, con 78 personas oficialmente desaparecidas. Detrás de estos datos desgarradores hay nombres, apellidos y dramas familiares que serán difíciles de superar. Las catástrofes no entienden de clase social, sexo o edad, y la última víctima es un niño de cinco años, el quinto menor que se ha cobrado esta gota fría.

Relatos Conmovedores de Pérdida y Supervivencia en Medio de la Devastación

Vidas Segadas por la Furia de la Naturaleza

El cuerpo sin vida del niño de cinco años fue encontrado por un perro del Servicio Cinológico de la Guardia Civil en el barranco de Palos (Chiva). El menor viajaba con sus padres cuando fueron sorprendidos por la riada. El cuerpo del padre también fue hallado, mientras que se continúa buscando el de la madre. Vidas segadas por un mismo drama en distintos puntos de las comarcas afectadas.Otro caso desgarrador es el del niño de 4 años de Sot de Chera, en los Serranos, que murió tras derrumbarse parte del edificio de cuatro plantas en el que vivía. Estaba junto a su padre, mirando por la ventana la intensidad de la lluvia, cuando el lugar que siempre se creía seguro, el hogar, se convirtió en su tumba. El padre continúa desaparecido.

Familias Destrozadas por la Tragedia

La familia de Antonio también sufrió una pérdida devastadora. Él, su mujer y su bebé de tres meses volvían de visitar a un familiar cuando la tromba de agua les sorprendió en una rotonda de Paiporta. Fueron encontradas ese mismo día muertas. Una vida truncada con tan solo tres meses.En Torrent, la muerte de otros dos menores también ha dejado a una familia rota de por vida. Viajaban con sus padres y otra hermana cuando fueron arrastrados por la corriente. Sus cuerpos fueron encontrados al día siguiente en un campo de naranjos.

La Desesperada Búsqueda de Niños Desaparecidos

La abuela de Izan y Rubén, dos niños vecinos de Torrent, ha hecho un llamamiento público desesperado por su desaparición. Según su relato, la última vez que los vio fue en su casa, donde habían estado almorzando. Luego su padre los recogió ante la previsión de que iba a llover mucho. Fue sobre las seis de la tarde, estando ya en la vivienda, cuando se quedaron sin luz eléctrica y poco después la casa se les cayó encima, entrando el torrencial de agua que arrasó la casa. El padre intentó agarrar a los niños, pero se les escaparon de la mano.Desde el ayuntamiento se ha puesto en marcha un amplio dispositivo con bomberos, agentes de la Policía Local y voluntarios, que trabajan sin descanso para localizarlos. El dron de la Policía no ha parado de revisar la zona en busca de los menores y también se ha rastreado con perros. Lamentablemente, la búsqueda ha sido infructuosa hasta el momento.

Historias de Heroísmo y Milagros

Pero también hay historias que dan luz a esta dantesca situación. Como la de un profesor de una academia de Paiporta que salvó a sus alumnos cuando el agua entraba sin parar al edificio. Sacando fuerzas de donde no podía, pudo romper el cristal de la puerta con la pata de una mesa y formando una cadena humana con otros profesores y los dos alumnos de mayor edad, fueron sacando y poniendo a salvo a cada uno de ellos.También hay milagros, como el de una madre de Pedralba que antes de que el agua pudiera ahogarlos, pudo sacar a sus hijos de 9 y 11 años de la zona de más peligro y resguardarlos en una caseta de aperos hasta que pudieron ser rescatados. A pesar de que lo perdieron todo, Valentín y Alejandro salvaron la vida, y este último incluso pudo cumplir 12 años recientemente.Estas historias de supervivencia y heroísmo en medio de la tragedia son un rayo de esperanza en un panorama devastador, y demuestran la fortaleza y el espíritu de lucha de la comunidad valenciana ante la adversidad.