Inma Lidón actualizó el miércoles, 11 de diciembre 2024 a las 23:12. En ciertos momentos, comprender a Hansi Flick no es una tarea fácil. Tratar de encontrar explicaciones sobre por qué quita del campo la habilidad de Dani Olmo, el brillo de Raphinha y la astucia de Lewandowski no es sencilla. Sin embargo, en Dortmund, cuando parecía que lo ganado se escapaba como agua entre los dedos en una segunda parte intensa, el alemán logró su objetivo. En la locura, cuando el Borussia aprovechaba de los pocos errores cometidos por el azulgrana, emergió Ferran Torres para asegurar tres puntos que casi garantizan que el Barça estará en octavos. [Narración y estadísticas (2-3)]

"El Barça demuestra su dominio en Dortmund, un duelo emocionante."

Primera Parte: El Dominio del Barça

En el Signal Iduna Park, el Barça mostró su doble cara dominante. Aunque a los alemanes les costó un minuto forzar el primer córner, el azulgrana estaba listo. No habían tenido problemas en atrapar a los alemanes en el fuera de juego. En escenarios tan grandes como aquel dominado por el Muro Amarillo, el equipo se mostró sólido. Por primera vez en la era de Flick, también mostró una versión de control y paciencia para ir desajustando al rival poco a poco, sin demasiados golpes forzados.La presión del Barça era altísima y efectiva. Balde intentó con un centro lateral que no llegó a Raphinha. Lamine respondió con otro que apenas tocó al capitán brasileño. El Barça no dudó en probar a Kobel con un disparo lejano. Su rival apenas podía correr a su espalda y, cuando lograba, caía en fuertes fueras de juego.

Segunda Parte: El Revés del Dortmund

Dani Olmo, Lamine Yamal y Raphinha dejaron conectar demasiado, lo que les costó durante los primeros 20 minutos. Pero el Barça seguía luchando. Raphinha falló en una ocasión hilvanada entre Olmo y Lamine, enviando el balón rozando el palo. El Barça dejó de ser vertical y comenzó a amasar el partido ante un rival muy ordenado en su área. A pesar de la maraña de piernas amarillas, Lamine logró encontrar el espacio suficiente para armar un zurdazo que obligó a la mejor parada de Kobel.Todo el control en el que se había recostado el Barça saltó por los aires en la segunda mitad. Sahin intentó intimidar con Yan Couto, pero Guirassy consiguió batir la meta azulgrana en un fuera de juego. Raphinha siempre aparece al rescate. Pedri roba y protege, encuentra a Olmo que, con un control orientado, lanza al capitán a la carrera entre Can y Schlotterbeck para encarar y batir a Kobel.

El Punto de Decisión

La alegría azulgrana de ver su dominio reflejado en el marcador duró un momento. Pero luego, Cubarsí derribó a Guirassy en el área en un gesto infantil, y el francés Letexier pitaron penalti que el guineano convirtió en el empate. Flick agitó el banquillo con Fermín y Ferran. Koundé puso un centro en el punto de penalti que el andaluz no embolsó y Ferran apareció para rebañarla. De nuevo el Barça tenía ventaja en el minuto 75, pero de nuevo no sabía protegerla. Desde el mismo saque de centro nació el empate cuando Gross esquivó la trampa del fuera de juego y le regaló el segundo gol a Guirassy.Sin embargo, el Barça no se cansó de remar. Pedri, catalizador, buscó a chispa de Lamine y el joven astro dejó al valenciano franco para batir a Kobel. Una bendita locura que demuestra la determinación del equipo.