Marc Márquez celebró su victoria en el esprint de Tailandia, marcando un hito importante en su carrera con la Ducati oficial. Este logro, junto con el segundo lugar de su hermano Álex, demostró el dominio de los Márquez en el evento. Sin embargo, Marc mantiene una actitud prudente y centrada, enfocándose en la carrera del domingo. Reconoce que su mayor desafío puede ser él mismo, trabajando para evitar excederse en confianza. Además, habló sobre la elección de neumáticos y el papel crucial de su equipo, especialmente Gigi Dall’Igna, quien ha depositado su confianza en él.
La victoria en el esprint de Tailandia fue más que solo un triunfo para Marc Márquez; fue el inicio de una nueva etapa con Ducati. Marc y su hermano Álex demostraron su dominio al ocupar las dos primeras posiciones, lo cual no pasó desapercibido. A pesar de este éxito inicial, Marc se mantiene cauteloso y consciente de que lo más importante aún está por venir: la carrera del domingo. Su enfoque en mantener los pies en la tierra es evidente, sabiendo que cada detalle cuenta en esta nueva aventura.
El sábado perfecto de Marc Márquez en Tailandia fue una mezcla de habilidad, estrategia y un poco de suerte. Consiguió la pole position y ganó el esprint, todo mientras compartía el podio con su hermano Álex. Esta combinación de resultados no solo fue un hito personal sino también un claro indicativo del potencial que tiene esta dupla con Ducati. Sin embargo, Marc insiste en que no se dejará llevar por la euforia del momento. Reconoce que cada paso es crucial y que la verdadera prueba será la carrera del domingo. La velocidad y la confianza que ha mostrado hasta ahora son prometedoras, pero también sabe que debe manejarlas con cuidado para no caer en excesos que puedan comprometer su rendimiento.
Marc Márquez abordó temas cruciales como la gestión de la presión y los desafíos internos que enfrenta. Reconoció que uno de sus mayores rivales podría ser él mismo, especialmente cuando se trata de mantener el equilibrio entre la confianza y la prudencia. Trabajó durante todo el fin de semana en encontrar ese punto óptimo donde pueda exprimir al máximo su potencial sin arriesgar demasiado. También habló sobre la importancia de elegir los neumáticos correctos para la carrera, optando por el blando delantero debido a su mejor rendimiento en las condiciones del circuito.
Uno de los puntos clave en la conferencia de prensa de Marc Márquez fue cómo maneja las expectativas y los desafíos personales. Reconoció que su mayor rival a veces es él mismo, especialmente cuando se trata de gestionar la confianza y evitar excederse. Durante el fin de semana, trabajó intensamente en encontrar ese equilibrio perfecto entre ir al límite y mantener la prudencia necesaria. Explicó que aunque siente mucha velocidad y comodidad en la moto, es vital no dejarse llevar por esa sensación y seguir siendo consciente de cada detalle. También discutió la elección de los neumáticos, destacando que prefirió el blando delantero debido a su mejor rendimiento en las condiciones extremas del circuito. En cuanto a su relación con el equipo, Marc enfatizó la importancia de la compenetración y la comunicación, reconociendo que Gigi Dall’Igna ha sido fundamental en este proceso. Finalmente, expresó su realismo ante el campeonato, advirtiendo que aún queda mucho camino por recorrer y que cada carrera puede traer cambios inesperados.
La familia Nieto sigue dejando su huella en el mundo del motociclismo, especialmente en MotoGP y SBK. Mientras Fonsi Nieto se desempeña como coach en Pramac Yamaha y Pablo Nieto dirige el equipo Pertamina Enduro VR46, ambos continúan honrando el legado de su padre y tío, Ángel Nieto. Este año, la competencia es más intensa que nunca, con Fonsi instando a Pablo a alcanzar nuevos logros. Además, reflexionan sobre el Mundial que arranca en Tailandia y las perspectivas para Marc Márquez y Pecco Bagnaia.
La rivalidad entre Fonsi y Pablo Nieto es un ejemplo de cómo el espíritu competitivo puede fortalecer los lazos familiares. Ambos primos compiten amistosamente mientras trabajan incansablemente por sus respectivos equipos. Fonsi, ahora con Pramac Yamaha, alienta a Pablo a superar los logros conseguidos con Jorge Martín en Ducati. Esta presión amistosa refleja el respeto mutuo y la pasión compartida por el motociclismo.
Los dos primos tienen una relación sólida que ha resistido incluso las diferencias profesionales. Fonsi menciona con humor que Pablo intentó hacer que salieran de Ducati, pero esto no ha afectado su vínculo. En cambio, han encontrado formas creativas de apoyarse mutuamente, como el uso del logo conmemorativo de Ángel Nieto en sus equipos. Este gesto no solo honra al fallecido campeón, sino que también simboliza la unidad familiar. La presión que Fonsi ejerce sobre Pablo es una forma de motivación, recordándole que ahora es su turno de conseguir grandes logros. Sin embargo, ambos reconocen que ganar un campeonato desde un equipo satélite es un desafío mayor, especialmente cuando se comparan con equipos oficiales como Ducati.
Mientras el Mundial de MotoGP se prepara para comenzar en Tailandia, Fonsi y Pablo reflexionan sobre el estado actual del campeonato y las expectativas para la temporada. Aunque lamentan la ausencia de Jorge Martín debido a lesiones, ambos destacan la importancia de mantener un espíritu positivo y seguir adelante. La competencia entre pilotos como Marc Márquez y Pecco Bagnaia promete ser emocionante, y los Nieto ven diferentes perspectivas sobre quién podría llevarse el título.
Fonsi cree que Marc Márquez tiene una ventaja significativa este año, atribuyendo su favoritismo a su actitud física y mental. Por otro lado, Pablo considera que la lucha está más equilibrada y que tanto Márquez como Bagnaia tienen igualdad de oportunidades. Ambos hermanos coinciden en que el Mundial está más emocionante que nunca, con una gran cantidad de talento compitiendo en cada carrera. También destacan el orgullo que sentiría Ángel Nieto al ver cómo su legado continúa a través de ellos y otros corredores españoles. Finalmente, subrayan la importancia de mantener un enfoque positivo y trabajar duro, independientemente de las dificultades que puedan surgir en el camino.