Die EBE ist sich dieser Aufgabe bewusst und beteiligt sich an der Europäischen Woche der Abfallvermeidung. Im Rahmen dieser Woche werden sie mit ihrem orangefarbenen Infomobil in verschiedenen Orten stehen und über Lebensmittelabfälle aufklären. Sie verteilen nicht nur Flyer und Kühlschrankmagnete, sondern auch nehmen Rezepte für Lebensmittelreste entgegen. Mit Hilfe der Essenerinnen und Essener sollen Rezepte und ein Kochbuch entstehen, das zahlreiche Rezepte aus Lebensmittelresten enthält und zum Nachkochen einlädt.
Jeder kann seine Rezepte per E-Mail an die EBE schicken (info@ebe-essen.de). Wenn viele Bürgerinnen und Bürger mitmachen, kann vor Weihnachten ein tolles Büchlein für den Gabentisch entstehen. Die ersten Rezepte könnten bereits mit Resten vom Weihnachtsmenü ausprobiert werden.
Wir sollten auch lernen, Lebensmittel zu konservieren und zu verarbeiten. Dazu gehören Methoden wie Kochen, Einlagern und Verarbeiten in Salze oder Süßigkeiten. Mit diesen Methoden können wir Lebensmittel länger aufbewahren und Abfälle reduzieren.
Außerdem sollten wir uns bemühen, uns mit anderen zu verständigen und zu lernen. Die EBE bietet Workshops und Veranstaltungen an, bei denen wir über Lebensmittelverschwendung und die Lösung dieser Probleme lernen können. Wir sollten uns bemühen, uns mit anderen zu verständigen und zu lernen, um gemeinsam eine Lösung für dieses Problem zu finden.
Darunter fallen die Verteilung von Flyern und Kühlschrankmagneten, die Aufnahme von Rezepte für Lebensmittelreste und die Herstellung eines Rezepte- und Kochbuches. Die EBE ist bemüht, die Öffentlichkeit zu sensibilisieren und zu unterrichten, wie wir Lebensmittel zu schonen und Abfälle zu reduzieren können.
Außerdem bietet die EBE Dienste für die Entsorgung von Lebensmitteln. Sie nimmt Lebensmittelabfälle entgegen und behandelt sie auf eine umweltfreundliche Weise. Dadurch können wir die Umwelt schützen und Ressourcen schonen.
Importa dedicar más tiempo de calidad con los hijos. Activamente participar en sus juegos, conversaciones y actividades escolares es esencial. No basta con estar presente físicamente; hay que estar presente emocionalmente.
Por ejemplo, al jugar juntos, los padres pueden aprender más sobre las emociones y pensamientos de sus hijos. Y durante las conversaciones, se fomenta el intercambio de ideas y la comprensión mutua.
Establecer el hábito de la lectura conjunta es beneficioso para todos. Ya sea antes de dormir o en momentos especiales, leer juntos fortalece el vínculo entre padres e hijos.
Pueden elegir libros interesantes juntos y crear un ambiente acogedor para la lectura. Esto no solo ayuda a mejorar la lectura de los niños, sino también a relajarse y disfrutar del tiempo en común.
Promover la salud y el bienestar haciendo ejercicio juntos es una excelente idea. Pueden hacer paseos en bicicleta, caminatas o juegos al aire libre.
Esto no solo fomenta un estilo de vida activo y saludable, sino también crea momentos de diversión y alegría. Los niños se sentirán más energéticos y felices al estar activos.
Comprometerse a mejorar los hábitos alimenticios es crucial. Incluir más frutas, verduras y comidas caseras en la dieta ayuda a mantener la salud física de los niños.
Los padres pueden involucrar a los hijos en la preparación de comidas saludables, lo que les enseña sobre la importancia de una alimentación equilibrada.
Anima a los niños a aprender algo nuevo, como un idioma, un instrumento musical o una habilidad manual. Esto les abre nuevas oportunidades y les ayuda a desarrollar sus habilidades.
Podrían organizar clases o talleres en casa para que los niños aprendan de manera divertida. Esto fomenta la curiosidad y el interés por el aprendizaje.
Inculcar el hábito de la gratitud en la familia es fundamental. Pueden mantener un diario de gratitud o compartir diariamente algo por lo que estén agradecidos.
Esto les enseña a valorar las pequeñas cosas en la vida y a ser más agradecidos. Los niños se sentirán más felices y contentos al apreciar lo que tienen.
Participar en actividades de voluntariado como familia es una gran manera de enseñar a los hijos el valor del servicio a la comunidad.
Pueden visitar un centro de atención a niños, ayudar en un proyecto de limpieza o participar en una caminata para recoger basura. Esto les enseña la importancia de ayudar a los demás.
Enseñar a los niños a aprender a organizar su tiempo es una habilidad valiosa. Estableciendo rutinas que equilibren estudios, juego y descanso ayuda a ellos a ser más productivos y felices.
Los padres pueden trabajar juntos con los niños para crear un calendario de actividades y enseñarles a priorizar. Esto les ayuda a desarrollar la capacidad de planificación.
Establecer límites saludables para el uso de dispositivos electrónicos es necesario. Reemplazar el tiempo en frente de pantallas por actividades que promuevan la interacción y la creatividad.
Pueden organizar salidas al aire libre o juegos en casa en lugar de dejar que los niños estén siempre conectados. Esto les ayuda a desarrollar otras habilidades y a desconectar de la tecnología.
Anima a los niños a expresar sus sentimientos, pensamientos y creatividad de la forma que más les apetezca. Pueden hacerlo a través del arte, la escritura o la conversación.
Crear un espacio seguro para que los niños puedan expresarse libremente les ayuda a desarrollar su identidad y a sentirse valiosos.
Enseñar a los niños a enfrentar los desafíos con positividad y una buena actitud es esencial. Les enseña a superar obstáculos y a crecer.
Pueden trabajar juntos en proyectos difíciles o enfrentar situaciones desafiantes. Esto les ayuda a desarrollar la resiliencia y a convertirse en personas más fuertes.
Mostrar y enseñar paciencia y empatía en la vida cotidiana es crucial. Los padres deben entender y respetar las emociones y opiniones de los niños.
Al resolver conflictos de manera pacífica y mostrando empatía, los padres les enseñan a los niños cómo manejar las emociones y a ser más compasivos.
Crear y mantener tradiciones familiares es la mejor manera de fortalecer lazos familiares y crear recuerdos duraderos.
Pueden ser tradiciones de Navidad, cumpleaños o fiestas de verano. Estas tradiciones se convierten en parte importante de la vida familiar.